Utilice nuestra guía sobre las herramientas y equipos de soldadura para joyería para descubrir exactamente qué es lo que necesita para dominar el arte de soldar joyas de metal.
La soldadura es el proceso que la mayoría de joyeros utiliza para unir piezas de metal formando así una unión permanente e invisible. Una vez dominada, es una de las técnicas más satisfactorias que puede aprender en joyería. Tanto el equipo como las técnicas de soldadura le permitirán crear piezas de joyería profesionales y con un gran acabado, que serán válidas tanto para su venta o para su disfrute personal.
Aquellos que se atreven al principio a soldar las joyas de metal eligen el denominado «soldado en frío» para su joyería usando alicates y alambre. Sin embargo, con un poco de práctica y eligiendo herramientas para el soldado, se puede convertir en una técnica muy versátil que puede ser incorporada a cualquier espacio de trabajo independientemente del tamaño.
Tanto para principiantes como para joyeros avanzados, esta es una lista de lo que tendría que haber en su kit básico de soldadura:
Soplete: Tenemos sopletes disponibles que se adaptan a todos los niveles y tipos de trabajo. Para los principiantes, un soplete de mano de butano les proporcionará el calor suficiente para completar trabajos de joyería a pequeña escala. Para trabajos a mayor escala y para plateros, se necesitará una llama mayor.

Fundir y cepillar: Cuando se calienta el metal, se forma una capa de óxido sucio que, si no se trata, inhibirá el fundido de la soldadura. Para evitar que esto nos pueda pasar, hay que limpiar las piezas del metal que van a ser unidas. En primer lugar, desengrase con papel de lija y a continuación aplique un fundente. Sellaremos la superficie del metal con el fundente creando una capa hermética, que a su vez permite que la soldadura se deslice. (Nota: Aplique el fundente solo donde vaya a soldar). Hay una gama de fundentes disponibles para satisfacer todas las necesidades, pero si no está seguro, comience por un polvo bórax y un plato.
Soldador: Aunque es estrictamente parte del material y no una herramienta de soldadura para joyeros, no podremos soldar sin él. Hay varios tipos de soldadores para elegir, aunque la mayoría de joyeros utiliza soldadura de oro o plata que se venden en hilo o tiras para temperatura alta, media, baja o muy baja. Esto último se relaciona con el punto de fusión. El de temperatura más alta es el que tiene el punto de fusión más alto siendo lo que más se utiliza. La soldadura debe estar limpia y debe ser cortada en pequeños trozos según necesite.

Cizallas: Se puede utilizar una gran variedad de cizallas con las que cortar su tira de soldadura en piezas pequeñas o para doblar láminas de metal y alambre en diversas formas.
Superficie resistente al calor: La preparación es la clave cuando estemos soldando joyería de metal y asegurarnos de que tenemos un área segura y limpia para trabajar es esencial. Mucha gente prefiere crear un área de soldadura usando bloques resistentes al calor que normalmente son de carbón, cerámica o sustituto del amianto.

Pinzas de apertura inversa: Estas pinzas son imprescindibles para sostener y colocar el trabajo mientras estemos soldando.

Pinzas de precisión y plástico: Cuando el fundido se calienta, burbujea y se mueve. Las partes de la soldadura a su vez saltan y se mueven fuera de su posición, algo que puede ser muy frustrante. Las pinzas de acero o titanio le ayudarán a realizar la soldadura con precisión y colocar las piezas de trabajo, garantizando el éxito de la soldadura de joyas. Se deben usar pinzas de plástico o de latón para retirar el decapado: cualquier cosa que contenga acero continuaría el decapado y producirá un revestimiento de cobre en todo su trabajo.
Placa de acero: Una pequeña placa de acero o bloque se utiliza al terminar el soldado, para que nuestro trabajo se enfríe antes de limpiarlo.
Decapante: Imprescindible cuando hablamos del soldado de joyería de metal o en soldadura para bisutería. Esta solución está hecha de ácido sulfúrico y se utiliza templada o fría para eliminar la capa de óxido que se produce mientras soldemos. Deberá guardar el decapante en un recipiente de cerámica, vidrio o plástico resistente al ácido. ¡NUNCA ACERO!

Cepillo de latón o polvo de piedra pómez: Después de la limpieza, las joyas necesitan ser enjuagadas y fregadas para eliminar cualquier rastro de suciedad. Un cepillo pequeño de latón o un cepillo de dientes impregnado en polvo de piedra pómez dejará al descubierto una superficie brillante lista para su pulido.
Observará que muchas de estas herramientas imprescindibles de soldadura son en realidad para los procesos de preparación y limpieza, no para el de soldadura en sí, pero son igual de importantes. Si se enfrenta a cada etapa de forma metódica y con calma, conseguirá buenos resultados. Y si por algún motivo no funciona a la primera, no se desanime. Limpie bien su pieza y vuelva a empezar. Recuerde que la práctica es lo que lo hace perfecto, así que ¿por qué no empezar hoy? Disfrutará de los resultados en muy poco tiempo.